Ser o no Ser

Ser dirigente en el Fútbol Argentino es lo más asimilable a ser dirigente político, sabes que si ejerces una función publica estas sujeto a que el reclamo, la desconfianza y la infamia, es moneda corriente. Queda en cada uno exponerse a todo esto sabiendo que uno es como es y que el único objetivo es cumplir su función de la mejor manera buscando siempre la mejor manera de progresar y ¨dejar algo¨ (positivo) para la institución. Sin que nadie me lo dijera supe que al momento de involucrarme activamente en la vida activa del Club tenia tres principios que cumplir (innato de mi persona) que me marcarían el camino a seguir y sobre todo siempre tenerlas en cuanta al momento de tomar decisiones:  1-La Institución siempre está por encima de las personas y de los intereses personales, 2-Nadie te obliga a ser dirigente, si estas es porque querés, 3- Nadie es indispensable, en más de 115 años de Historia mi persona y mi labor es insignificante. Obviamente que acompañados de la humildad, honestidad, criterio, pasión y responsabilidad la función dirigencial tendría que ser un compromiso con satisfacción y no un peso o una carga. Lamentablemente no todo es tan fácil, por eso hay mucha gente que prefiere ver el partido e irse a su casa o simplemente mirar desde afuera y criticar libremente como si esas personas son  un tesoro no aprovechado por la Institución. Evidentemente y a rigor de verdad el mundo de los Clubes es en mayor o menor medida lo mismo, tenés los viejos que siempre lo de antes fue lo mejor, los plateistas puteadores, los barras insaciables, los eternos opositores, los idealistas, los colaboradores de palabra, los hipócritas, y los muchachos de la prensa partidaria (párrafo aparte en próxima entrega). Ahora bién si todo es tan malo o difícil como subsisten los Clubes del Futbol Arg. al día de la fecha y sobre todo uno de 115 años de Historia?, porque hay personas que logran abstraerse de ese mundo falaz y van hacia adelante tratando de mejorar lo malo, evitar equivocarse y poniéndose objetivos claros de dejar algo en el paso de su gestión que quede para arraigado en la Institución. Esas personas ¨Los dirigentes¨ a los que tranquilamente se los podría llamar ïnsanos¨ son justamente los que mantienen vivas las Instituciones. Dedicarle horas y horas al Club dejando de lado a mi familia, mi trabajo, mis amigos, mi salud, le genera a la gente normal unas preguntas para nada originales y por demás recurrentes: para que caraj.. vas? … como que lo haces gratis? y la verdad me quedo sin palabras emito una leve sonrisa que contiene una respuesta a la que ¨los normales¨nunca van a poder entender. Nunca van a poder entender que uno lo hace por amor, por pasión, porque asumió una responsabilidad, porque quiero un Club mejor al que me dejaron, porque quiero un gran Club ahora no cuando yo ya no este, porque soy solidario, porque siento que puedo hacer lo que me gusta, porque es más fuerte que yo, porque me da satisfacción. Se muy bien que en este mundo dirigencial cuando uno asume hipoteca en parte su vida, y en algún momento lo va a tener que pagar si no quiere quebrar, el tiempo con su familia es sagrado, el dinero que deja de ganar y sobre todo la ¨malasangre¨ que uno se hace son todas las facturas a pagar y lidiar con esto es parte de lo difícil e inentendible a lo que estamos sujetos. Mi padre nunca fue dirigente por no tener tiempo para dedicarle a la función dirigencial, creo que lo han puesto en listas sin su consentimiento pero a él lo único que le importaba era dar ser el Medico del Club los días de partido sea preliminar o primera y ver tranquilo los partidos. Yo a diferencia me metí de lleno y arranque como abogado del Club y hoy soy un dirigente plenamente activo,  esta escritura es en parte para compartir con ustedes esta Hipoteca que tengo que pagar, pienso que dar a conocer que se siente tal vez podamos a dar a conocer como es y como se puede mejorar la función, al fin de cuentas más que un ¨Dirigente¨soy un idealista.

Nanni, más que un dirigente.